¿Estas Navidades te has olvidado de la dieta? De nada sirve ahora tener remordimientos de culpa, porque de igual forma que has sido tolerante saltándote la dieta, lo puedes ser de dura para cumplirla.
Al final no deja de ser un combate interno, debes ser tú la luchadora.
Si no te gusta no te conformes y actúa, pero deja de culparte. No has hecho nada malo y no debes castigarte.
Focaliza esa energía para cumplir nuevos retos, solo TÚ tienes esa voluntad y nadie más lo va a hacer por ti.
Empieza el año con ACCIÓN, es lo único que hará que te muevas.
¡A por todo!