Saltar al contenido
- RECHAZA
LOS ALIMENTOS DE ORIGEN INDUSTRIAL que contengan más
de 14 gramos de grasas por ración.
- LEE
LAS ETIQUETAS. Sospecha de los alimentos que se preparen con grasas trans,
hidrogenadas, aceites de palma o aceites vegetales refinados.
- AUMENTA
LA TOMA DE CARNE Y PESCADO FRESCO, comprados al corte o a peso.
- LOS
CONGELADOS CON UN SOLO INGREDIENTE (merluza ultracongelada, gambas, etc.)
pueden colarse en tu lista de la compra.
- EN
EL SÚPER, ESQUIVA EL PASILLO DE DULCES Y SNACKS. Son ricos en azúcares y grasas.
- DE
POSTRE, ELIGE LA FRUTA o lácteos sencillos, como el yogur o el kéfir.
- LIMITAR
LAS SALSAS INDUSTRIALES y, si estás a dieta, vigila las caseras.
- Cocina con ACEITE
DE OLIVA VIRGEN.
- SUSTITUYE
LA BOLLERÍA INDUSTRIAL por frutos secos,
fruta o repostería casera.
- COCINA COMBINANDO MATERIAS PRIMAS DE CALIDAD. Cuando convenga, añade alimentos
mínimamente procesados.