Los alimentos termogénicos son aquellos que tras su consumo, provocan un ligero aumento de la temperatura corporal, lo que acelera levemente, el metabolismo durante su digestión. Sus efectos se notan.
La cayena, por ejemplo, puede aumentar el gasto calórico que se produce al digerir entre un 10 y un 25%. Todas las especias picantes como la pimienta, jengibre, curry, etc. Cuentan con éste poder o virtud.
Garantizar la presencia de alimentos ricos en proteínas completas como carne, pescado, huevos, o legumbres, en todas las comidas principales es una excelente medida, debido a ese mismo efecto térmico, mientras nuestro cuerpo digiere éste macro nutriente gasta del 20 al 35 % de las calorías consumidas.
Nada que ver, con el gasto energético que invierte asimilando las grasa o carbohidratos, que no supera el 10%.
LAS ALMEJAS TAMBIÉN TE AYUDAN A CONTROLAR EL PESO
Pocos alimentos son tan ligeros, además tienen un alto contenido en yodo, clave para ver tus esfuerzos recompensados, las almejas mantienen más activo el metabolismo y ayudan a que bajes de peso de forma progresiva.
Gracias a su riqueza proteica, son muy saciantes, siempre y cuando se cocinen de forma sencilla.
Añádeles limón, y evita las salsas calóricas y procesadas, y no te defraudarán.